Resiliencia se ha convertido en un término popular, pero ¿qué significa ser resiliente?
La adversidad es parte de la vida. Resiliencia es la inefable capacidad que le permite a ciertas personas anteponerse a las distintas adversidades que se les presentan en la vida diaria. Permite desarrollar conductas positivas ante el estrés, las amenazas o algún conflicto. En su libro “Resiliencia” los autores Andrew Zolli y Ann Healy definen a la resiliencia como la capacidad de un sistema, empresa o persona para mantener su propósito central e integridad ante un cambio dramático de circunstancias.
Más allá de dejarse vencer por el fracaso o las dificultades, las personas resilientes siempre encuentran una forma de “renacer desde las cenizas”. Algunos psicólogos, han identificado ciertos factores que hacen a una persona resiliente; por ejemplo, el optimismo, una actitud positiva ante la vida, la habilidad para regular las emociones y la capacidad para entender el fracaso como una consecuencia del aprendizaje.
Las personas resilientes suelen tener buena confianza en sí mismos, toman riesgos de manera inteligente, tiene un fuerte deseo por aprender y son capaces de emplear recursos sociales, físicos y psicológicos para mantener su bienestar. Lo que aún no se sabe, es si una persona con estas características se hace más resiliente de manera inconsciente o si ser conscientemente resiliente resulta en el desarrollo inconsciente de estas habilidades.
¿Por qué nos interesa la resiliencia?
Porque esta característica nos permite perseguir nuestras metas sin importar los factores externos que puedan estar contraviniendo a nuestras acciones.
Aquellas personas con baja resiliencia culpan a los factores de estrés externos, se sienten abrumados con facilidad, se estancan en los problemas y viven con angustia constantemente. Las personas altamente resilientes tienden a tomar mayores responsabilidades personales, minimizan la culpa y entienden los factores de estrés como un reto y no como una amenaza que les impide dar el siguiente paso.
Si bien en cierto que algunos retos son más grandes que otros, todos nos enfrentamos a diversas situaciones de estrés, cambios de circunstancias drásticos y adversidades; se descompone el carro, alguien amado muere, tenemos problemas de salud, económicos, personales… la lista de factores de estrés es interminable y viene en muchas formas y tamaños; sin embargo, lo importante a tener en cuenta es que el estrés es subjetivo y que las consecuencia que este tipo de eventos tendrán en nuestra vida dependen, en gran parte, de nuestro nivel de resiliencia. ¿Qué cambios puedes hacer en tu vida diaria para fortalecer esta habilidad?