¿Alguna vez has escuchado el término mindfulness?
Si todavía no estás familiarizado, en este artículo te compartiremos qué es, en qué consiste, qué beneficios pueden obtener tus hijos y algunos consejos para que puedas empezar a realizarlo en la comodidad de tu casa y en compañía de los pequeños.
Mindfulness se traduce del inglés como “atención plena”, es una técnica de meditación , normalmente es utilizada en jóvenes y adultos; sin embargo, esto no quiere decir que los niños no sean capaces de realizarlo. Por otro lado, tiene como objetivo generar el bienestar físico y emocional de una persona. Se enfoca en el aquí y en el ahora, en que los niños puedan estar en el presente de una manera consciente.
Algunos de los beneficios que los niños pueden obtener gracias a la práctica del mindfulness son los siguientes:
- Mejora su concentración
Los niños que practican esta actividad de manera contante mejoran su capacidad de concentración. Además, otros aspectos tales como la memorización, la atención y el aprendizaje se verán beneficiados.
- Ayuda a regular las emociones
La práctica ayuda que los niños puedan aprender el autocontrol de sus emociones y sentimientos. Les será más sencillo no dejarse llevar por sus impulsos y tendrán un mejor comportamiento, a su vez los ayudará a reducir la ansiedad y el estrés.
- Fomenta la consciencia
Gracias a esta técnica, el mindfulness los hace más conscientes sobre ellos mismos. Aprenden a reflexionar sobre su persona, el entorno que los rodea y, a su vez, sobre sus pensamientos e inquietudes.
- Desarrolla la empatía
Cuando los niños son capaces de reflexionar sobre sus sentimientos y la conducta que tienen habitualmente, la capacidad de la empatía mejora y son capaces de ponerse en el lugar de las demás personas.
Ahora que conoces los beneficios que tus hijos pueden obtener del mindfulness, te compartimos algunas formas para poder aplicarlo en ellos.
- Existen muchas aplicaciones para descargar en tu teléfono celular como Mindful Powers, Smiling Minds, Calm o Headspace. Estas aplicaciones te podrán servir de guía si todavía no tienes idea de cómo llevar a cabo una sesión de mindfulness.
- Realizar ejercicios cortos de respiración; no necesitas mucho tiempo como habitualmente se piensa, tan solo necesitas 10 minutos y un lugar tranquilo. Para que tu hijo entienda cómo tomar consciencia sobre su respiración puedes hacer que tome a su peluche favorito y lo coloque encima de su pecho con la posición boca arriba.
- Existen algunos libros enfocados en el bienestar de los niños, te recomendamos que leas antes de dormir en compañía de tus hijos la colección “Aquí y Ahora. Mindfulness para Niños” de la autora Begoña Ibarrola para que ellos puedan aprender sobre aspectos importantes como la gestión emocional y el autoconocimiento. Otro libro que te recomendamos es “Tranquilos y atentos como una rana” de Eline Snel.
Gracias por leer este artículo, esperamos que haya sido de tu agrado y que pongas en práctica estos consejos para que en un futuro los niños tengan el hábito de la meditación. En Unidos, queremos que los niños sean responsables de sus vidas y que puedan alcanzar un buen nivel de satisfacción tanto emocional como físico.
Redaccion: Staff